¿Cómo funcionan los créditos universitarios?

Los créditos universitarios son una unidad de tiempo que mide la dedicación (horas) de un estudiante para una determinada materia. Así pues, en cada país del mundo, las carreras profesionales, máster, maestrías o doctorados comprenden un determinado número de créditos universitarios.

En España, los créditos universitarios se conocen como créditos ECTS y se empezaron a emplear cuando entró en vigor la famosa reforma universitaria del Plan Bolonia. Esto quiere decir que cada crédito tiene una equivalencia de 30 horas de estudio para un estudiante (25 en algunas disciplinas).

1 crédito universitario equivale a 30 horas de estudio

Salvo algunas excepciones que tienen una equivalencia de 25 horas

Uso de los créditos universitarios (ECTS) en España

El Plan Bolonia define que un año académico estándar tiene su equivalencia en 60 créditos ECTS, así pues, para que un estudiante pueda certificar unos estudios debe superar un determinado número de créditos de cualquier formación y tener una institución educativa que lo reconozca (y que esté aprobada por los organismos públicos).

En España, por ejemplo, un estudiante deberá superar 240 créditos ECTS de estudio para una carrera de cuatro años y un total de 60 créditos ECTS para obtener un máster de un año. Sin embargo, en el resto de Europa, es más frecuente encontrar másters de 90 o 120 créditos. En cuanto al doctorado, el número de créditos universitarios necesarios varía según el país.

No obstante, existen algunas carreras excepcionales en las que los alumnos necesitan acumular más créditos de estudio. Tal es el caso de carreras como arquitectura y farmacia, con 343 ECTS; Odontología y Veterinaria, con 300 ECTS; y Medicina, con 360 ECTS.

Es necesario apuntar también una función de movilidad en los créditos ECTS y es que, al ser un sistema de créditos universitarios global para las universidades regidas por el Plan Bolonia, los estudiantes pueden apuntarse a programas de intercambio estudiantil (como el programa Erasmus) para completar cursos completos en el extranjero con la seguridad de la convalidación.

Por lo tanto, sabiendo todo esto podemos resumir que los créditos universitarios en España o créditos ECTS tienen una importante labor de normalización, tanto a nivel nacional como europeo, facilitan la movilidad de estudiantes y ordenan el tiempo de estudio de cualquier formación universitaria.

¿Qué suma para conseguir créditos universitarios?

Antes de 1999, fecha en la que se aprobó el Plan Bolonia, en España un crédito universitario suponía un total de diez horas lectivas de clase, mientras que por el sistema European Credit Transfer System (ECTS) no sólo se cuantifica las horas presenciales de clase, sino que también las horas de estudio, las horas de elaboración de proyectos o de estudio para exámenes.

No obstante, al estar los créditos determinados por las distintas legislaciones educativas del mundo es normal que los alumnos de otras partes, como Latinoamérica se preguntes qué han de hacer para obtener créditos universitarios.

La respuesta es muy sencilla: apuntarse a una formación superior universitaria. Una de las opciones más sencillas y comunes es la de los máster oficiales, que ya cuentan con un aval universitario, un reconocimiento de créditos y una formación de calidad.

Es necesario apuntar que los créditos universitarios en España no se ciñen a la modalidad presencial, sino que las modalidades online o semipresencial son otras alternativas más económicas para aquellos que necesiten una certificación reconocida con créditos ECTS para ejercer una profesión.

Créditos de libre configuración

En algunas carreras, el plan de estudios no está configurado para completar los 240 créditos necesarios por norma general, de tal manera que los estudiantes se pueden llegar a encontrar en una situación un tanto rara: aprobar todas las asignaturas de la carrera, pero no llegar al tope de créditos necesarios para reconocer la titulación.

En este sentido, los créditos de libre configuración sirven a los estudiantes para acumular los necesarios hasta completar los 240 obligatorios. En algunas carreras son necesarios más, como hemos señalado arriba y, además, los créditos se obtienen asistiendo a formaciones adicionales no incluidas en el plan de estudios.

Los créditos de libre configuración se pueden obtener de varias formas, como asistiendo a seminarios, conferencias o actividades extrauniversitarias (la más común es la práctica deportiva) no necesariamente relacionadas con el ámbito de estudio. Las prácticas profesionales o el estudio de otras titulaciones que puedan convalidarse son otras opciones.

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